¿Has escuchado del fenómeno de la sinestesia? Cuando los olores se pueden escuchar, cuando los sonidos se pueden probar y lo que vemos se puede saborear. Parece algo loco ¿no? Pues es real y a continuación te explicaremos en que consiste. ¿Cuál es el origen de la sinestesia?
Una de las causas de la sinestesia se debe a uno de los principales centros cerebrales del color, llamada área V4, en los lóbulos frontales. En esta parte del cerebro existen áreas especializadas en números, por ejemplo si se tiene una lesión justo en esa parte, la persona perdería habilidades aritméticas o numéricas, entonces, si se une este hecho a que la sinestesia más común tiene que ver con el número-color (asociar un color a un número y poder recordarlo mejor), refuerza la hipótesis de la conexión transversal entre las áreas del cerebro.
Además, existen algunos estudios que mencionan que la sinestesia puede llegar a ser “hereditaria”, ya que hay más posibilidad de experimentarla si hay una persona en tu familia que ya la haya experimentado antes, o sea que tiene una base genética. Sin embargo, la sinestesia no solo tiene que ver con números y colores, como mencionábamos al principio, también se pueden ver sonidos y tiene que ver con los centros auditivos de los lóbulos temporales, que se encuentran muy cerca de áreas cerebrales que reciben señales de color de V4.
Sin embargo, no solo se logra la sinestesia a través de las conexiones cerebrales o por base genética. También existen personas que han experimentado sinestesia al consumir drogas de tipo alucinógeno como LSD, mescalina, hongos psicoactivos, entre otras. Y también existen casos de personas que experimentaban sinestesia en su vida diaria, que al consumir antidepresivos, se suprimía su sinestesia.
Entre las principales sinestesias son la graféma color, que tiene que ver como lo explicamos anteriormente, con que los números y letras tengan color, pero también puede tener color las unidades de tiempo, los sonidos, los géneros musicales, lo que olemos puede tener color, lo que probamos, lo que nos duele, lo que tocamos e incluso nuestras emociones o los orgasmos.
Sin embargo, no todo tiene que ver con los colores, podemos saborear todo nuestro entorno, incluso saborear las texturas, el tiempo, la luz, incluso a otras personas. En al sinestesia todos los sentidos están involucrados y entrelazados en mayor o menor medida. ¿Acaso todas las personas percibiremos lo mismo?